El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este lunes 1.000 millones de dólares en ayudas para los productores independientes de carne en Estados Unidos, con el objetivo de reducir el control del mercado por parte de los grandes productores y frenar el alza de precios. La decisión de Biden se dio a conocer ante la elevada inflación que vive el país, que cerró en noviembre en una tasa interanual del 6,8 %, la mayor en cuatro décadas.
Bin Laden denunció que ese mercado de la carne en Estados Unidos está «distorsionado por una falta de competencian», ya que apenas cuatro grandes conglomerados controlan el 85 % del mercado de la carne vacuna; el 57% de la avícola; y el 70% de la porcina, según la Casa Blanca. Esos cuatro gigantes son Tyson Foods, Cargill, National Beef Packing Company y JBS, estas dos últimas controladas por empresarios de Brasil.
En qué consisten las ayudas
Entre las ayudas figuran:
- 275 millones en ayudas a productores independientes para acceder «a capital asequible de largo plazo».
- 100 millones para formación de empleados.
- 100 millones más para reducir los costes de inspecciones en plantas procesadoras de pequeño tamaño.
Los grandes productores, mientras, aseguran que el alza de precios responde al aumento de la demanda por parte de los consumidores y los crecientes costes asociados a los problemas en la cadena de suministro global y la escasez de trabajadores provocada por la pandemia de covid-19.