Los eurodiputados han votado en el Palamento Europeo mantener las normas existentes (y en contra de ampliar la directiva de emisiones industriales) que cubrían las granjas porcinas con más de 2.000 plazas para producción porcina (más de 30 kg), o con más de 750 plazas para cerdas, y las de aves con más de 40.000 plazas, así como fincas con al menos 750 unidades ganaderas. A pesar de esto, el Parlamento no ha incluido en este top al ganado vacuno. El Parlamento también ha subrayado la importancia de garantizar que los productores fuera de la UE cumplan requisitos similares a las normas comunitarias.
El Parlamento ha reconocido que la directiva es un instrumento legislativo que ignora las realidades básicas del sector ganadero. La ampliación de esta propuesta causaría un aumento de costes muy elevados, provocando el cierre de explotaciones ganaderas y desplazando la producción hacia países extracomunitarios, como han expresado las diferentes asociaciones.
Para Copa y la Cogeca, los eurodiputados han enviado un claro mensaje de apoyo al sector agrario.