Los sistemas ganaderos deben avanzar apoyándose en criterios científicos de la más alta calidad. Estos sistemas deben continuar siendo parte de nuestra sociedad, de la que cuentan con un amplio apoyo.
Por ello, se ha pedido a la comunidad científica que faciliten pruebas fiables de su beneficio en la nutrición y en la salud, de su sostenibilidad, y de su relevancia sociocultural y económica; así como de ofrecer soluciones para las numerosas mejoras que se necesitan.
¿Pruebas, por qué?
Desafios sin precedentes: Por un lado, la ganadería tiene la necesidad de incrementar la disponibilidad de alimentos derivados de la producción animal (carne, lácteos, huevos) para satisfacer los requerimientos nutricionales de unos tres mil millones de personas; algunos métodos y la intensidad de la producción animal presentan desafíos relacionados con la biodiversidad, el cambio climático y el flujo de nutrientes; así como como para la salud y el bienestar animal.
Ganadería y salud humana: Los alimentos derivados de animales de abasto suministran una gran variedad de nutrientes esenciales, así como de otros compuestos beneficiosos para la salud, los cuales escasean en la mayoría de las dietas a nivel mundial, incluso entre poblaciones con un alto nivel de ingresos. Evidencias científicas, del más alto nivel, en bio-evolución, antropología, fisiología o epidemiología recalcan que el consumo regular de carne, lácteos y huevos, como parte de una dieta equilibrada, es beneficioso para el ser humano.
Ganadería y medio ambiente: Los animales de granja y de pastoreo son irreemplazables para mantener un flujo circular de materiales en la agricultura, ya que son capaces de reciclar, de diversos modos, la gran cantidad de biomasa no comestible que se genera como un subproducto durante la producción de alimentos que el hombre necesita para su dieta.
Por todo ello, si eres científico, apoya esta declaración (la redacción de este texto está recogida en el “Solution Cluster on Sustainable Livestock” de la “Cumbre sobre los sistemas alimentarios” de la ONU, 2021).
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