La octava edición del Barómetro de la Industria Cárnica ha dejado clara la difícil situacion que atraviesan muchas compañías al tener que hacer frente al incremento de los costes energéticos y de las materias primas. El 87,3% de las empresas participantes en el Barómetro han mostrado verse afectadas por todos estos factores.
Según han apuntado ANICE y Cajar, los impulsores del Barómetro, se ha producido también una bajada en el sentimiento hacia la industria cárnica que ha podido provocar situaciones como la ralentización del consumo, la inflación y un entorno no favorable para la actividad cárnica en el que se está pidiendo reducir el consumo de carne o nuevos impuestos al uso de plásticos en el sector alimentario.
Sobre la marcha de las exportaciones, para las empresas son un importante motor económico para el sector, de acuerdo con lo manifestado por el 83,7 % de las empresas.
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