El Senado italiano ha aprobado la prohición el uso de denominaciones que hagan referencia a la carne y sus derivados para productos procesados que en su lugar contengan exclusivamente proteínas vegetales, los conocidos como análogos cárnicos. «Con la aprobación de nuestra reforma aseguramos el derecho de los ciudadanos a la corrección de la información para proteger su salud e intereses, pero también reconocemos y defendemos el valor cultural, socioeconómico y medioambiental de nuestros productos ganaderos y empresas elaboradoras«, aseguran los parlamentarios italianos en declaraciones recogidos por los medios del país transalpino.
Se trata de un paso más al proyecto legislativo aprobado en marzo de este año para prohibir la producción y comercialización de los alimentos sintéticos, como la carne cultivada, argumentando la falta de estudios científicos sobre los mismos y las desigualdades que podrían ocasionar a nivel nutricional.
Coldiretti, la mayor asociación de ganaderos y agricultores del país, aplaudió la aprobación del texto.
La medida del Senado debe ahora ser aprobada en las sesiones plenarias del Parlamento.