La vacunación no sólo favorece el bienestar animal, sino que también ayuda a reducir la necesidad de uso de antibióticos. La vacunación es la administración de una vacuna que contiene un microorganismo o virus debilitado, vivo o muerto o proteínas o toxinas de dicho organismo. La vacunación ayuda al sistema inmunológico a desarrollar inmunidad contra las enfermedades, estimulando la inmunidad adquirida del cuerpo sin infectarlo con la enfermedad.
Las vacunas ayudan a prevenir enfermedades y funcionan mejor cuando se vacunan grupos o poblaciones enteras de animales. Cuando se vacuna un porcentaje suficientemente alto de la población, la inmunidad de rebaño o de grupo puede incluso ayudar a proteger a los no vacunados.
En las circunstancias adecuadas, puede utilizarse durante los brotes de enfermedades como una alternativa viable al sacrificio sanitario, evitando así los problemas de bienestar que puede causar el sacrificio en las granjas.
La vacunación es un método muy eficaz para prevenir enfermedades causadas por agentes infecciosos. En animales, se ha estudiado y verificado ampliamente la eficacia de la vacunación. Si un animal vacunado entra en contacto con una enfermedad, su sistema inmunológico la reconocerá y producirá inmediatamente los anticuerpos que necesita para combatirla. La vacunación promueve el bienestar animal protegiendo la salud animal.
En las circunstancias adecuadas, puede utilizarse durante los brotes de enfermedades como una alternativa viable al sacrificio sanitario, evitando así los problemas de bienestar que puede causar el sacrificio en las granjas. También en acuicultura, los avances en la tecnología de vacunación, el diagnóstico y la nutrición están ayudando a mantener la salud y el bienestar de los peces, reduciendo la necesidad de tratamientos con antibióticos.
Proteger la salud animal mediante la vacunación mejora el bienestar animal, y mantener un buen bienestar garantiza que los animales puedan responder exitosamente a la vacunación. Las vacunas son una inversión inteligente con enormes ventajas para el bienestar animal, ya que los brotes de enfermedades suelen ser impredecibles y tienen importantes implicaciones financieras para la ganadería. Las vacunas autorizadas están sujetas a rigurosos estándares de seguridad y controles de calidad y son muy seguras.
Proteger la salud animal mediante la vacunación mejora el bienestar animal, y mantener un buen bienestar garantiza que los animales puedan responder exitosamente a la vacunación.
La Estrategia de Salud Animal de la Comisión Europea (2007-2013) lanzó el lema: “Más vale prevenir que curar”, y este enfoque se ha adoptado ampliamente por veterinarios, ganaderos y la industria de la salud animal en los últimos años. Los veterinarios son grandes defensores de la vacunación y, en 2016, crearon el Día Mundial de la Vacunación Animal, un día anual de concienciación fijado el 20 de abril, para recordar a todos los dueños de animales la importancia de la vacunación en la salud y el bienestar animal.
Los veterinarios creen que una mayor vacunación en ganadería y acuicultura puede incidir realmente en el nivel de enfermedad entre las poblaciones animales. Asimismo, la industria de sanidad animal apoya este enfoque de prevención, investigando y desarrollando nuevas tecnologías de vacunas para enfermedades existentes y emergentes, así como desarrollando nuevas formas de administración de vacunas para hacer que la prevención de enfermedades sea aún más sencilla y reducir el estrés de los animales durante la administración.