La carne y los productos elaborados de porcino forman parte de una alimentación completa porque aportan los nutrientes que necesitamos, lo que les convierte en muy adecuados para franjas de edad como los niños. Así ha quedado reflejado en el evento ‘Nutrición y hábitos de vida saludables’ organizado por INTERPORC en el marco de los Diálogos EFE en Madrid.
El acto ha contado con la participación de Antonio Escribano Zafra, director de la Cátedra Nutrición, Salud y Sector Agroalimentario, del centro de estudios Marañón-Fundación Asaja; Gaspar Ros Berruezo, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad de Murcia, y decano de la Facultad de Veterinaria de Murcia; y Alberto Herranz, director de la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (INTERPORC).
Durante el diálogo, Antonio Escribano y Gaspar Ros han explicado el alto valor biológico y nutricional de los productos porcinos, destacando que aportan proteínas, todos los aminoácidos esenciales, minerales como el hierro y el zinc y, sobre todo, vitaminas del grupo B, que permiten el correcto funcionamiento del sistema nervioso e inmunitario.
En este sentido, han puesto énfasis en que la vitamina B12, esencial para el desarrollo de los glóbulos rojos y el cerebro, prácticamente está solo en la carne y que, aunque se intente suplementar con productos químicos, eso solo cubre en parte su carencia por no comer carne de manera natural.
Desmentir bulos
Por su parte, el director de INTERPORC se ha referido a la comunicación que realizan desde la Interprofesional para desmentir bulos relacionados con el consumo de carne de porcino en la que “siempre nos apoyamos en lo que dice la ciencia”.
En ese sentido, ha destacado que cualquier adulto es muy libre de seguir la dieta que más le guste, pero, en el caso de los niños, médicos y nutricionistas recuerdan constantemente que “precisan una dieta equilibrada, por lo que conviene tener mucho cuidado y no privarles de alimentos adecuados para sus necesidades”.
El hierro ayuda mucho al desarrollo cognitivo de los niños; el potasio a su sistema inmunitario y a sus músculos; el fósforo a sus huesos y dientes; y las vitaminas del grupo B a su sistema nervioso y a reducir su cansancio. “Todo eso está presente en la carne y los productos porcinos”, ha recordado Herranz.
Esa es la razón, ha señalado, por la que INTERPORC realiza frecuentemente talleres para niños en los que les ayuda a que conozcan más sobre esta carne y sus nutrientes y puedan identificarla tanto en frescos como en derivados.
